Según un informe publicado el día 17 en la web neozelandesa stuff, SubCom, uno de los «tres grandes» de los cables submarinos, está preparando el envío de un barco profesional de reparación de cables desde Papúa Nueva Guinea a Tonga para arreglar el cable de Tonga que ha provocado la interrupción de las conexiones telefónicas y de Internet.
Los cables submarinos de Tonga, que transportan casi todas las comunicaciones hacia y desde Tonga, dejaron de funcionar poco después de la erupción volcánica del día 15. Las comunicaciones telefónicas y de Internet hacia y desde Tonga podrían verse limitadas durante semanas tras confirmarse que 827 kilómetros de cable que une Tonga con Fiyi han sido cortados en el mar. El presidente de Tonga Cable, Samiuela Fonua, dijo que la sección internacional del cable había sido cortada a 37 kilómetros de la capital de Tonga, Nuku’alofa, y que la red de cable nacional que une la isla principal de Tonga, Tabu, con otras islas también había sido cortada a unos 47 kilómetros de Nuku’alofa.
Dijo que la Compañía de Cable de Tonga decidió el día 17 comenzar los preparativos para enviar el buque de reparación de cables de SubCom, Reliance, a Tonga, posiblemente a través de Samoa, tras la comunicación con la compañía de cable estadounidense SubCom. El buque está actualmente atracado en Port Moresby, Papúa Nueva Guinea, y Fonua dijo que probablemente zarpará en tres o cuatro días, cuando Tonga Cable podría saber más sobre el programa de reparación.
La portavoz de SubCom, Courtney McDaniel, dijo que Reliance estaba «a la espera de las empresas que han contratado servicios de protección por cable» en el Pacífico Sur.
La reparación de una rotura en un cable de fibra óptica importante en tierra suele ser una tarea relativamente sencilla, que sólo requiere unas pocas horas del tiempo de un empalmador de fibra óptica experto.
Aunque no es raro que los cables se corten accidentalmente durante las obras de carreteras y otras obras civiles, la reparación de un cable cortado en el fondo del mar es más compleja. A menudo es necesario identificar la ubicación aproximada de la avería desde tierra observando la distancia que recorre el pulso de luz a lo largo del cable antes de rebotar. Un buque especializado en la reparación de cables acudirá entonces al lugar de los hechos y tomará el cable con un gancho sumergible o de aguas profundas, incluso partiéndolo por la mitad si es necesario para poder subirlo a bordo para su reparación.
En la actualidad, decenas de buques especializados en el tendido y la reparación de cables están estacionados en todo el mundo, listos para responder a este tipo de emergencias.